domingo, 1 de abril de 2012

Daisy


Llegando el anochecer 
el se disponía a compartir una noche con amigos. Una remera, un jean, un poco de perfume y listo para salir...
Me voy, le dijo, y ambos se saludaron con un romantico beso. 


Un buen restaurante, excelente compañía, una copa de vino, y una divertida charla entre amigos hacían de su salida algo realmente entretenido.
Mas tarde el y todos ellos fueron a su club preferido. Luces, buena musica, y con un trago en la mano empezaron a conversar y sonreír..., era una noche muy divertida, pero no seria una mas. El disfruto y bailo casi toda la noche, estaba feliz...
Al llegar la madrugada saludo a sus amigos y se retiro del club, tomo un taxi y en minutos llego a su casa. 


Al entrar al departamento sintió algo diferente, paso a paso subió los escalones que lo dirigían a la habitación, esperando acostarse a su lado. Al llegar, ya con sus ojos vidriosos, vio que su silueta ya no estaba, encendió la luz y solo pudo ver un placard vacío..., sus pertenencias ya no estaban. Un escalofrío corrió por su cuerpo, ella se había ido...
Solo al mirar la cama pudo ver tirada aquella muñeca de peluche que con tanto amor el le habia regalado, si, era Daisy, lo ultimo que quedaba...